¿Qué es el TDAH?
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad es un problema real y no es una invención o cuestión que surge como consecuencia de la falta de límites e inmadurez como se suele creer. El TDAH es producto de una disfunción química que provoca una alteración en el funcionamiento cerebral y que si bien puede estar influido por el medio que le rodea, no está generado por este, sino que es causado por componentes genéticos y factores ambientales que aumentan el riesgo de padecerlo (ingesta de alcohol, drogas y tabaco en el embarazo, prematuridad, bajo peso al nacer, etc.) (Russi, 2020).
Tratamiento:
El tratamiento farmacológico es la opción a la que más se recurre para tratar este trastorno; no obstante, pacientes que reciben psicoterapia conductual, capacitación para los padres y madres y/o cuidadores y neuroretroalimentación han demostrado éxito en su mejoría, llegando a necesitar menos fármacos o incluso a dejar de usarlos. Asimismo, diversos estudios concluyen que la psicoterapia y el tratamiento farmacológico funcionan mejor en conjunto
Algunos síntomas del TDAH:
· Fallo para prestar atención profundamente a los detalles.
· Dificultad para sostener la atención en las actividades.
· No escucha cuando se le habla directamente.
· No sigue las instrucciones que se le dan.
· Dificultades para seguir conversaciones.
· Se distrae fácilmente por estímulos externos.
· Es intranquilo.
· Se levanta del asiento cuando debería permanecer sentado.
· Va de un sitio para otro en situaciones en las que debería estar quieto.
· Tiene dificultades para jugar sosegadamente.
· Habla excesivamente.
· Impulsividad.
· Contesta las preguntas antes de serle formuladas.
· Tiene dificultades para esperar su turno.
· Interrumpe o molesta a los otros niños
(Asociación Americana de Psiquiatría, 1994)
¿Cómo ayudar a mi hijo/a con TDAH en la escuela?
La sintomatología del TDAH puede funcionar como obstáculo en el trabajo, relaciones interpersonales y la escuela; sin embargo, no es imposible que los/as niños/as diagnosticados con este trastorno puedan prosperar en la etapa escolar. Como se señaló previamente, la terapia conductual y la medicación ayudarán a contrarrestar el comportamiento problemático de los/as niños/as, por lo cual es importante que un profesional de la salud mental (psicólogos/as y psiquiatras) elaboran un riguroso diagnóstico para, a partir de ello, elaborar un plan de tratamiento. Por otro lado, una adecuada concientización del personal escolar hacia el TDAH permitirá poder adaptar los planes de estudio, los entornos de clase y los procedimientos de prueba a los estilos de aprendizaje de los/as alumnos/as con este diagnóstico para, de esa manera, compensar los retrasos en el desarrollo
Por otro lado, desde su rol como padre o madre de familia, puede realizar lo siguiente:
· Elabore listas, recordatorios, previsiones, límites, etc., ya que los/as niños/as con este diagnóstico necesitan estructura, por lo que estructurar su ambiente favorecerá mucho a su desarrollo y adaptación.
· Repetir las instrucciones las veces que sean necesarias, pues los/as niños/as con TDAH necesitan oír las cosas más de 1 vez.
· Dividir las tareas largas en varias actividades cortas para evitar la fatiga y agotamientoen el/la niño/a.
· Sea creativo e innove las tareas diarias para su hijo/a.
· Elogie a su pequeño/a cada vez que logra algo.
· Aplique trucos, claves y códigos para favorecer a su aprendizaje.
· Simplifique en palabras sencillas las indicaciones e instrucciones que le da a su hijo/a.
· Elaborar un sistema de recompensa para favorecer a la modificación conductual.
· Mucho amor y paciencia, pues las conductas y comportamientos de los/as niños/as con este diagnóstico son difíciles de controlar por ellos/as mismas.
(Fundación CADAH, s.f.)